jueves, 4 de enero de 2007

Reporte del Museo Julsrud



Pues en efecto, como dije que lo iba a hacer, visité el museo "Waldemar Julsrud", me volé un folletito y comí delicioso mole. Y dejenme les platico lo que encontré:
El museo cuenta con unas cuatro salas, aunque el área del patio y obra negra es muy extensa. Además hay una sala al final con unas compus desconectadas y empolvadas. Al principio, el museo trata de la vida del señor Julsrud que, en efecto, era alemán, de la localidad de Bremen. Llegó a México por los beneficios que ofrecía nada menos que Porfirio Díaz y hasta hay una foto en la que salen juntitos el comerciante teutón y nuestro ilustrísimo dictador. Después de comerciar en la capital, anduvo rolando y con la revolufia se tuvo que pelar pa salvar el pellejo, y casi lo agarran y ya después por (té de) azares del destino llegó a Acámbaro pa poner una ferretería. En esta parte de la exposición, que es el mero principio, hay fotos del señor desde que era un chilpayate, efectos personales, máquinas de escribir viejitas, libros que hablan de las piezas, el traje con el que montaba el señor (con el que montaba caballos, claro) y una vitrina con varias de las enigmáticas figuras y un pejelagarto (en serio) disecado hasta mero arriba. Pero ninguna de las figuras cuenta con ficha de esas que les ponen en los museo con su lugar de localización, medidas, técnica, qué representa y demás datos. ¿Cómo la ven?
En los textos informativos que estan en las paderes, además de la vida de don Julsrud, comienzan a hablar de las figuras, refiriendose a ellas como "criaturas prediluvianas" y afirman que (palabras más, palabras menos) "o los dinosaurios vivieron aún en tiempos en los que el hombre ya habitaba la tierra, o el hombre vivía desde tiempos de la existencia de los dinosaurios". ¿Una tesis difícil de defender? Ya lo creo. Sobre todo sin, creo yo, datos duros y evidencia que la respalden. Pero sigamos. En las siguientes salas hay algunas vitrinas con muchas de las figurillas de barro. En efecto, muchas de ellas semejan reptiles (pero eso: reptiles, no necesariamente dinosaurios) y son pocas las figuras con ficha, y las que la tienen no dan gran información acerca de las artesanías; alguna dice que es un murciélago, otras que son criaturas imaginarias, pero escasas son las que se refieren con exactitud a qué especie de dinosaurio representan. De hecho, uno está completamente erguido, con la espalda recta hacia el cenit, como los dinos de las pelis viejitas en blanco y negro, y en un programa de la tele ví que la posición correcta de los dinosaurios era más bien como la del Tiranosaurio de Jurassic Park: la cola, el tronco y la cabeza más o menos alineados en un mismo plano horizontal. Los que hicieron las figuras de barro vieron unos dinosaurios medio raros ¿no?.


A la izquierda, una figura del museo; a la derecha una imagen del Tiranosaurio.

Las figuras fueron horneadas, eso sí. Hasta algunas se ven medio chamuscadas y parece que no estaban cromadas. Dicen que de estupenda manufactura pero la mera verdad, conociendo la capacidad alfarera de los mayas o de la misma cultura Chupícuaro, estos son - y realemten parecen- hechas por niños. Segun yo, claro está.
Ya al final, en el patio, hay una piedra con un bajorrelieve que la neta no supe qué significaba pero estaba más definido, aunque tampoco contaba con nada de información, pero nadita de nada.
Por último, el folleto (que estaba en el Museo Local y no en el visitado) trae algunas fotos e información que está ¡En inglés!(quiero pensar que por los hermanos que nos visitan de tierras anglosajonas en estas fechas). Esta información habla de cómo y quién descubrió las figuras y luego, una segunda parte que me sacó de onda, ya que el encabezado decia "Acambaro, ancient Aztlán?" y pensé que eso ya era demasiado jalado. Pero mi hermano, que es historiador, me dijo que se cree que Aztlán está localizado en Nayarit o en alguna región... del Bajío, y más luego un tío me dijo que en el Cerro del Chivo hay un centro ceremonial al que no dejan pasar y esto se pone interesante. Claro que este hecho no tiene necesariamente que ver con los dinosaurios de barro, pero quizá sí con eso del origen de Aztlán. El folleto da un poco de información acerca de esa teoría y enlista una serie de preguntas que a continuación transcribo (en inglés, respetando el original):
1.-The arrival of men to this region
2.-The founding of Aztlán and how men stablished Chicomostoc as the cultural center of Aztlán.
3.-How the Julsrud collection of 32,000 pieces came to this place
4.-The birth of Purépecha or Mechoacán Kingdom
5.-The birth, summit and end of Chupícuaro Culture.

Ay quedan las preguntas que cuando pueda se las respondo. A ver qué podemos averiguar con más Monos Enterrados.

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